Diario de Campo

 Me encontraba en camino a hacer mi investigación sobre un pueblo que desconocía por completo y estaba muy intrigado a ver qué se encontraba en él o qué cultura tenían los habitantes. Estaba en el carro de mi compañera y después de un viaje largo de 3 horas por fin había llegado al pueblo llamado Monguí. Lo que primero me percaté después de entrar al pueblo fue que estaba lleno de un cálido color verde por todos lados, una hermosa iglesia en el centro de todo y una grande plaza para pasear y hacer diferentes eventos. Observé lo que más pude alrededor mío y admiré todo el pueblo. Lo primero que me percaté al ver todo, como la construcción, fue que tenían una hermosa arquitectura rustica y con un aire muy campesino, así que me pregunté ¿Cómo es que el pueblo de Monguí llegó a construir todo esto? ¿De qué forma? ¿Con cuales materiales? ¿Cuáles culturas influyeron en el proceso? ¿Quiénes dieron la idea? Tenía tantas dudas al respecto que decidí hacer mi investigación sobre ese tema en concreto: La arquitectura. Sabia que el pueblo de Monguí era muy famoso por tener más de 30 fabricas de balones y tener un buen turismo, pero sin duda la arquitectura me interesaba más.

Estaba demasiado cansado así que decidí ir enseguida hacia el hotel que habíamos reservado, entré y se encontraba el dueño del hotel esperándonos para darnos nuestras habitaciones, muy amable el señor, por cierto, así que puse mis datos en una hoja, me dieron mi llave y fui a descansar un rato. Mi compañera aprovechó y propuso entrevistar al dueño del hotel, era el momento perfecto para iniciar mi investigación. Por lo tanto, nos sentamos en el comedor y comenzó la entrevista. Empezamos preguntándole sobre su vida personal, sobre su historia, y nos cuenta que había vivido toda su vida en este pueblo, lo cual fue gracias a su papa, el papá del dueño de hotel era el alcalde del pueblo, por lo tanto creció con buena educación. Luego el señor nos cuenta sobre el hotel y su historia es que el papá del dueño siempre recalcaba que el pueblo tenía todo, pero le faltaba un hotel así que él se puso en marcha y lo construyó. El hotel era la casa donde vivía está familia, una familia de unos padres y cuatro hermanos, pero dicha casa fue expandiéndose más hasta convertirse en un hotel. El hotel contaba con demasiadas cosas características sobre la familia del señor y sobre el pueblo en general como por ejemplo una escultura de un perro querido que tuvieron y fotografías sobre el paisaje de Monguí.

Terminando la entrevista al dueño del hotel me dejo varias cosas de qué pensar sobre mi investigación y cómo podría guiarla. Posteriormente, fuimos a explorar un poco más sobre el pueblo conocimos el puente colonial y visitamos la basílica.

Dentro de la basílica se encontraba un museo con obras de arte y elementos característicos de Monguí, todo esto acompañado de un gratificante recorrido, dentro de la Basílica de nuestra señora Monguí. El señor Ricardo estaba dispuesto a hacernos el recorrido. Comienza explicándonos desde la estructura de la iglesia y de la basílica hasta las obras de arte que enmarcaron la historia del pueblo. Sin duda pensé que él seria de gran ayuda para mi investigación, así que quería entrevistarlo el día siguiente. El señor Eduardo tenia un hijo el cual también nos acompañó en el recorrido del museo y por supuesto no iba a perder la oportunidad de entrevistarlo también. En esta basílica se encontraban muchas cosas por recorrer, las cuales eran demasiado interesantes. El recorrido comenzó hablando sobre la estructura de la basílica y los diferentes materiales que se encontraban en está, la historia que llevaba a cabo y el diseño arquitectónico de esta. Posteriormente, se habló de la restauración de la basílica, esta se ve como un gran logro para el municipio de Monguí, nos contaron que esta reconstrucción terminó en 2016, duró más de un año y fue demasiado costosa. Luego se habló de las diferentes obras de arte que llegaron a Monguí y que se hicieron ahí, cada una tenia su historia llamativa. Lo que más me cautivo sobre las pinturas fue el hecho de que hablaban a través de estas; es decir, utilizaban la pintura como herramienta evangelizadora, las obras se convertían en el mejor modo para transmitir la religiosidad dentro del pueblo. El resto del recorrido consistió en concluir sobre las obras de arte y la arquitectura de la basílica.

Al siguiente día, me iba a dedicar totalmente a realizar entrevistas, quería resolver la mayoría de las dudas que se me habían surgido el día anterior. Comencé por el hijo del señor Ricardo, el guía del museo. Pregunté sobre las diferentes tribus que habían influido en la creación de la cultura Monguí, me respondió que existieron tres asentamientos indígenas, en donde predomino una sola y fue la Sanoa. Minutos después entrevisté al señor Ricardo, el cual parecía tener más conocimiento sobre la historia de Monguí, por lo cual tuvimos una conversación acerca de la restauración y del turismo del pueblo.

En la tarde fui al museo del balón y aproveché y entrevisté a dos personas, a una señora y un señor. Me contaron sobre la historia del balón de Monguí y por qué era tan característico para ellos. Me enteré de que existían unas 30 fábricas de balones alrededor del municipio. Sin embargo, quería saber si de alguna manera había influido en la arquitectura, pero lastimosamente no.

Por último, me pareció pertinente entrevistar una vez más al dueño del hotel en el cual me hospedé. Me interesaba saber como fue el proceso de construcción de este. El señor retomó la historia de su padre y la idea de creación del hotel. Luego pregunté como se interesó en el diseño del hotel, se estableció una conversación sobre la construcción de todo el pueblo. El pueblo se basó en la estética colonial y pasada, las personas seguían el ejemplo de otras casas para poder construir la suya, las casas contenían materiales locales y mayormente naturales, después las personas empezaron a agregarle el color característico verde a las puertas y ventanas para darle más vida al pueblo.

Ya para terminar, me despedí de las diferentes personas del pueblo y tomé varias fotos sobre las casas y la plaza central. Hice mi reflexión sobre las cosas que aprendí, para ya después emprender mi viaje devuelta a casa.